Bergara

El Goizper Group BKE se queda sin Liga Vasca tras caer en semifinales

Ante una grada con varias pancartas de ánimo y muy poblada de un público que no dejó de apoyar a las bergaresas, las jugadoras no acertaron en el primer cuarto, fruto del nerviosismo por la transcendencia del choque. Arrastraron el mal comienzo durante todo el encuentro. En el primer tramo quedaban por detrás en el electrónico con un 11-17.

En el segundo cuarto el ajuste defensivo y el mayor acierto en ataque apretaron el tanteador hasta un esperanzador 25-29.

La reacción fue puntual, en el tercer cuarto volvieron a mostrar sus carencias como el bloqueo en el ataque. Las visitantes aprovecharon la situación para marcharse de quince puntos.

No se rindieron y en el tramo final fueron a por todas, como señala el técnico del BKE, Alex Familiar. «Con una diferencia tan grande, en el último cuarto decidimos arriesgar, subiendo la línea de presión defensiva, y jugando los ataques a pocos segundos, con el ánimo de cambiar el ritmo del partido. Fuimos acortando distancias poco a poco, hasta llegar a situarnos a dos puntos a un minuto del final. Pero el Internacional fue muy eficaz en ese momento en los tiros libres, y nosotras, fruto de la necesidad de tomar decisiones rápidas, no pudimos acertar».

La derrota dolió y más en casa, pero como destacan desde el banquillo del Goizper Group BKE el balance de la temporada es fantástico. «No esperábamos estar al nivel que nos hemos encontrado, y nos da esperanzas para que la próxima campaña volvamos a disfrutar en los puestos de arriba».

El último compromiso también fue el de la despedida de las capitanas Marina Juaristi y Maite Gallastegi. «Las vamos a echar muchos de menos. El momento del adiós fue emotivo porque ellas son de las impulsoras del proyecto hace siete años». Desde el club también han querido agradecer el empuje y la presencia del público en el polideportivo.

No fueron mejor las cosas al día siguiente domingo para el cadete femenino que perdió la final contra Goierri por 40-47 puntos en la misma cancha.

El partido empezó con mucho acierto en el tiro exterior para adelantarse 12-4, pero el Goierri hizo valer su físico de jugadoras de segundo año para ir al descanso con un 16-21. La dinámica se mantuvo a la vuelta de vestuarios, y la ventaja se amplió hasta los 16 puntos, «como ocurrió con las sénior, en los últimos minutos tomamos más riegos, acortamos la distancia hasta los 7 puntos».