Pradales carga contra el «numerito» de Ayuso hacia el euskera y no sabe «si merece la pena volver» a la Conferencia de Presidentes

Pero no solo ha criticado a Ayuso, también a los demás presidentes del PP que han decidido no ponerse el pinganillo en la conferencia para escuchar lo que decía el lehendakari en euskera. Aunque cabe destacar que Pradales ha señalado que algunos de esos mandatarios populares «han estado especialmente incómodos con la actitud de la señora Ayuso». «Siempre digo que acudiré a donde estén en juego los interés de todos los vascos, hemos venido por respeto institucional y con espíritu propositivo, pero visto lo visto no sé si merece volver», ha dicho con cierta decepción.

Además, ha añadido que «no tienen respeto a la Constitución», pero que, a pesar de ello, «los vascos seguiremos aquí, hay más de un millón de hablantes y pronto el euskera será oficial en Europa». También ha asegurado que «estas actitudes recuerdan a épocas oscuras». «En 1937 los franquistas avisaban en Donostia de lo siguiente: se denunciará a todo aquel que infrinja la obligación no hablar idiomas y dialectos que no sea el español», ha recordado el lehendakari. Y ha vuelto a enviar otro mensaje claro a Ayuso: «No quiero vivir en un país en el que me den la libertad de tomarme una caña, quiero vivir en un país en el que pueda hablar mi idioma», ha afirmado en referencia a la famosa frase de la presidenta madrileña.

El lehendakari también ha dicho que no ha tenido ninguna conversación con Ayuso durante la Conferencia de Presidentes: «Ha sido hábil en evitar cualquier tipo de encuentro conmigo como lehendakari. Lo ocurrido hoy y lo ocurrido en Santander nos obliga a reflexionar sobre si esta es la mejor forma de trabajo».

Durante los días previos a esta cumbre de líderes autonómicos ya se intuía que la reunión en el Palacio de Pedralbes no iba a ser un remanso de paz. Más bien, todo lo contrario. Y el momentáneo abandono de Ayuso durante el encuentro -ha salido de la sala en señal de protesta por el uso de las lenguas cooficiales y después ha regresado- no ha hecho si no acrecentar la tensión.

Tras este episodio protagonizado por la baronesa del PP, desde Lehendakaritza han querido expresar su «profundo malestar», apuntan, por la actitud de algunos presidentes autonómicos durante la intervención de Pradales en la Conferencia de Presidentes. Y ya no solamente por la «intolerable falta de respeto mostrada hacia el euskera, los miles de euskaldunes, el lehendakari y el pueblo vasco» que ha demostrado la presidenta de la Comunidad de Madrid al abandonar la sala cuando el jefe del Gobierno Vasco ha comenzado su intervención en euskera, si no también porque otros líderes autonómicos -en alusión al PP, aunque desde Lehendakaritza no han querido señalar unas siglas en concreto- optaran por «no utilizar» el sistema de traducción habilitado para garantizar la comprensión mutua entre los representantes institucionales presentes, ya que había traducción simultánea.

«La intervención del lehendakari dentro del marco habilitado por la organización de la propia Conferencia, que ha permitido expresarse también en catalán, gallego y castellano, constituye un avance democrático y un ejercicio de respeto a la pluralidad lingüística del Estado», defienden desde Lehendakaritza. Es la primera vez que el Gobierno central ha permitido emplear las lenguas cooficiales en este foro, de la misma manera que se hace en el Congreso y el Senado desde el inicio de esta legislatura, lo que ha despertado reticencias entre los populares. De hecho, Ayuso ya amenazó ayer con levantarse de la silla y, finalmente, ha cumplido su advertencia. Lo que ha provocado gran malestar en el Gobierno Vasco.

Las mismas fuentes sostienen por ello que «respetar las lenguas oficiales no es un gesto menor: es una cuestión de derechos de igualdad lingüística, respeto institucional, cultural y democrático». «El euskera es lengua oficial y patrimonio de toda Europa», defienden.

Esta no ha sido, sin embargo, la única reacción que ha suscitado la actitud de la presidenta madrileña. A través de las redes sociales, el presidente del Euzkadi Buru Batzar (EBB), Aitor Esteban, ha lamentado que «quien se escandaliza por el empleo del euskera o el catalán tiene un serio problema y demuestra que carece de argumentos profundos para hacer política». «Ondo, lehendakari!», le ha felicitado a Pradales el líder del PNV, que recientemente ha protagonizado también un duro choque con el PP, a quien los nacionalistas vascos acusan de haber estado presionando para que la Unión Europea aplazase la decisión de que el euskera, el catalán y el gallego sean oficiales en la Eurocámara. Lo que ha provocado una guerra entre ambas formaciones.

De hecho, la 'número 2' del partido, Maitane Ipiñazar, ha afirmado que «es una falta de respeto al lehendakari, a las instituciones vascas y a la ciudadanía vasca». «La persona considerada defensora de la libertad -ha dicho con ironía en alusión a Ayuso- ha abandonado la sala cuando el lehendakari ha hablado en una lengua oficial como el euskera. Esto demuestra el nivel de la presidenta de la Comunidad de Madrid y demuestra la importancia que tiene el euskera para el PP de Euskadi», ha declarado Ipiñazar.

Por su parte, el portavoz de EH Bildu en el Parlamento Vasco, Pello Otxandiano, ha advertido de que «tampoco los fascistas del siglo XXI» van a conseguir «hacer desaparecer» el euskera, tras la salida de Ayuso de la Conferencia de Presidentes.

«No pudieron hacer desaparecer un pueblo, su lengua, su cultura y su ansia de libertad. Tampoco lo van a conseguir los fascistas del siglo XXI», ha señalado el dirigente de la coalición soberanista, que ha remarcado que «somos euskaldunes y estamos orgullosos».

También la diputada general de Gipuzkoa, Eider Mendoza,se ha pronunciado al respecto y ha tildado directamente de «autoritaria y antidemocrática» la actitud de la presidenta madrileña. «Es un desprecio absoluto hacia nuestra lengua, identidad y país», ha denunciado a través de sus redes sociales.

Mendoza, que ha mostrado todo su apoyo al lehendakari y al Gobierno Vasco, ha asegurado que «seguiremos defendiendo el euskera con firmeza y dignidad». «No vamos a permitir que se utilice nuestra lengua como arma política para polarizar y dividir», ha advertido.

La vicepresidenta segunda del Gobierno, Yolanda Díaz, también ha criticado la actitud de la mandataria madrileña y ha sentenciado que la «diversidad» lingüística del país «solo ofende a quienes tienen una visión muy limitada de España». «Nuestras lenguas y culturas nos hacen mejores», ha destacado Díaz en un mensaje escrito en gallego en sus redes sociales.