¿Quiénes eran la pareja de jóvenes judíos asesinados en Washington?

«Formaban una pareja preciosa», declaró el embajador de Israel en la capital estadounidense, Yechiel Leiter, quien contó en declaraciones a los medios tras el crimen que Yaron había comprado un anillo para pedirle matrimonio a Sarah en el viaje a Jerusalén que tenían planeado para la próxima semana. Este crimen a sangre fría, que se investiga como un posible acto antisemitismo, truncó para siempre los planes de futuro de estos dos empleados de la embajada israelí en Washington.

Lischinsky formaba parte del departamento político de la delegación diplomática como investigador asistente para asuntos de Oriente Medio y el Norte de Áfroca. Antes se había licenciado en Relaciones Internacionales en la Universidad Hebrea de Jerusalén y estudió un máster en Gobierno, Diplomacia y Estrategia en la Universidad privada Reichman en la ciudad de Herzliya, al norte de Tel Aviv.

El joven diplomático emigró a Israel desde Alemania con 16 años, por lo que presumía del «privilegio» de considerar su hogar tanto a Jerusalén como a Núremberg. Asimismo, hablaba tres idiomas con fluidez (inglés, hebreo y alemán) y tenía conocimientos básicos de habla y escritura japonesa. Entre sus aficiones, destacaba la pasión por la fotografía.

El perfil de Lichinsky en LinkedIn no deja lugar a dudas sobre su opinión respecto al conflicto árabe-israelí. «Soy un firme creyente en la visión de los Acuerdos de Abraham y creo que ampliar el círculo de paz con nuestros vecinos árabes es lo mejor para Israel y todo Oriente Próximo». Esos pactos de 2020 recogen la normalización y la paz, además del establecimiento de relaciones diplomáticas de Emiratos Árabes Unidos (EAU) y Bahréin con Tel Aviv.

«Con este fin, abogo por el diálogo interreligioso y el entendimiento intercultural. Más allá de Oriente Medio y Norte de África, sigo de cerca los acontecimientos políticos en Estados Unidos, Europa y Asia», agrega en la red social Lischinsky, quien sirvió durante tres años en el ejército hebreo en cumplimiento del servicio militar obligatorio.

Por su parte, Milgrim, con un grado de Estudios Internacionales de la Universidad Americana y un máster en Recursos Naturales y Desarrollo Sostenible de la Universidad para la Paz (creada por Naciones Unidas en 1980), se encargaba de la geopolítica en Oriente Medio dentro de la institución y organizaba los viajes a Israel. Igual que su novio Yaron, defendía los Acuerdos de Abraham.

«Yaron y Sarah eran nuestros compañeros y amigos. Estaban en la flor de la vida. Todo el personal de la embajada está destrozado por su asesinato. No hay palabras para expresar la profundidad de nuestro dolor y horror por esta pérdida devastadora», indicó la Embajada de Israel en Estados Unidos en un comunicado en la red social X. El crimen conmocionó a la comunidad judía y hasta el lugar se acercaron varias personas para rendir homenaje a las víctimas con banderas israelíes.